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Tabaquismo: Dejar de fumar es posible

por Farm. Silvia Esper (Córdoba, Argentina)

Hechos, no mitos

Si realmente quiere dejar de fumar, empiece por conocer los hechos sobre qué es realmente el tabaquismo y deseche los muchos mitos que a pesar de no tener ningún fundamento continúan manteniéndose sobre este tema.
Fumar no es un vicio, ni les falta fuerza de voluntad a quienes no consiguen abandonar el consumo de tabaco al primer intento. Fumar es una adicción.

Hay dos razones que explican la alta dificultad que supone para muchas personas dejar de fumar:
1. El tabaco atrapa porque contiene nicotina, una droga adictiva
Además de ser un producto peligroso para la salud por el alto contenido en sustancias nocivas, el tabaco es una droga que puede llegar a crear una importante dependencia.
La alta capacidad adictiva de la nicotina hace que después de un breve período de consumo esporádico el organismo se adapte rápidamente a un nivel de nicotina, y lo precisa para funcionar con normalidad.
La privación del nivel de nicotina al que se ha acostumbrado el cuerpo es la causa de los síntomas desagradables que se experimentan cada vez que se intenta dejarlo.


En 1988, el Ministerio de Salud de Estados Unidos clasificó a la nicotina como una sustancia adictiva. El cigarrillo y otros derivados del tabaco generan dependencia con un mecanismo similar al de la adicción a drogas como la cocaína y la heroína.
En 2001, la Investigación Nacional Domiciliaria sobre uso de Drogas en Estados Unidos, realizada por el National Health Institute, arrojó las siguientes estadísticas del cuadro, donde se compara la nicotina con otras drogas, en términos de capacidad de causar dependencia, letalidad, acceso y precocidad en el uso.
Se comprueba que el tabaco está primero.

(click sobre el cuadro para ampliarlo)


2. El cigarrillo refuerza el poder adictivo de la nicotina

El gesto de fumar se convierte en un acto automático, asociado firme e inconscientemente a muchas actividades de la vida diaria.
Pensar en la posibilidad de vivir normalmente el día a día sin el cigarrillo causa una sensación de vacío, de pérdida, difícil de superar. Es normal sentirse así, porque se ha desarrollado una importante dependencia psicológica del tabaco.



¿Está preparado para dejar de fumar?

Para saber si realmente quiere dejar de fumar haga dos listas de motivos:

1.Lista de motivos por los que fuma: anote todas las compensaciones inmediatas que le proporciona el tabaco.

2.Lista de motivos para dejar de fumar: anote todas las razones por las que quiere dejar de fumar.

Analice ambas listas. ¿Qué razones valora más?

Si los motivos por los que quiere dejarlo son realmente más importantes que los motivos por los que fuma, ya puede seguir avanzando en el plan para dejar de fumar.
En cambio, si los motivos para dejarlo no le parecen realmente más importantes, necesitará un poco más de tiempo para ir encontrando
sus propias razones para dejar de fumar. Esto es muy importante, porque la motivación debe nacer de uno mismo y deberá encontrar y afianzar sus razones, no las de otros.

Si aún no las tiene, no se desanime, lea la información proporcionada, vaya pensando en ella y en los motivos de su Lista 2, y dentro de un tiempo vuelva a retomar esta página.

La importancia de dejar de fumar

El consumo de tabaco es la mayor causa de muerte EVITABLE.
Cada año 40.000 argentinos mueren por una enfermedad relacionada con el consumo de tabaco.
El consumo de cigarrillos es el principal factor de riesgo para el cáncer de pulmón, el cáncer más frecuente. También está relacionado con el cáncer de esófago, de laringe, de riñón, de páncreas y de cuello uterino. Fumar aumenta también el riesgo de otros problemas de salud, como enfermedades pulmonares crónicas y enfermedades cardíacas. Fumar durante el embarazo puede tener efectos muy graves en el bebé por nacer, como el parto prematuro y el bajo peso al nacer.



Dificultades relacionadas con dejar de fumar

Como la nicotina es una droga muy adictiva, el dejar de fumar se asocia generalmente con un síndrome de abstinencia importante que se manifiesta con ansiedad, irritabilidad, hambre, cansancio, dificultad para concentrarse y problemas para dormir.
Muchas de las personas que dejan de fumar aumentan de peso aunque generalmente el aumento es menor de 5 kilos. Hacer dieta mientras está tratando de dejar de fumar puede ocasionarle un estrés innecesario y NO se aconseja. En cambio, puede limitar el aumento de peso teniendo a la mano caramelos o chicles dietéticos, frutas y haciendo ejercicio regularmente.


Terapia de reemplazo de nicotina

La nicotina es la droga en los cigarrillos y en otras formas de tabaco que causa la adicción. Los productos de reemplazo de nicotina suministran dosis pequeñas, continuas, de nicotina al cuerpo, lo cual ayuda a aliviar los síntomas de abstinencia que con frecuencia sienten las personas que tratan de dejar de fumar. Estos productos, que en Argentina están disponibles en forma de parches y chicles, resultan muy efectivos. Los investigadores recomiendan combinar la terapia de reemplazo de nicotina con el consejo o asesoramiento de un médico, dentista, farmacéutico u otro profesional de la salud. El parche de nicotina suministra una cantidad continua de nicotina al cuerpo a través de la piel. Se vende sin receta en varias concentraciones como tratamiento para dejar de fumar en 8 semanas. El Chicle de Nicotina también se vende sin receta. En general es útil usarlo durante las primeras 8 semanas, que es cuando el síndrome de abstinencia puede hacer fracasar el intento de dejar de fumar.

¿Por qué se usa Nicotina?

Cuando usted fuma, inhala más de 4000 sustancias tóxicas, entre ellas DDT, arsénico, amoníaco, cadmio, polonio 210 (radioactivo), insecticidas , etc. La Nicotina es la sustancia que genera adicción. Si bien se asocia con un cierto daño, éste se debe principalmente a la ingestión de las otras sustancias. De este modo, al usar nicotina o sustitutos, se puede atenuar los síntomas molestos de la abstinencia, sin incrementar el riesgo de daño.

¿Sirven las terapias con láser o con acupuntura?

No existe suficiente evidencia como para recomendar ninguno de estos tratamientos: ansiolíticos, terapias aversivas, acupuntura, hipnosis o láser.

Medicamentos coadyuvantes

Acompañan el tratamiento para ayudar a controlar el sindrome de abstinencia. Todos deben ser supervisados por un médico, por sus muchos e importantes efectos adversos.

*Bupropion (Wellbutrin, Odranal, Lung): es un antidepresivo que produce una inhibición de la absorción neuronal de norepinefrina, serotonina y dopamina, aumentando su concentración en la sinapsis neuronal. Esta deplección de mediadores parece ser la causa del síndrome de abstinencia de la nicotina. Su actividad sería reemplazar esta falta y haciendo desaparecer, o disminuir, los síntomas de la falta de nicotina.

Si bien en diferentes estudios bien controlados, el 44% de pacientes que consumían bupropion dejó de fumar , al suspender la medicación la mayoría volvió a hacerlo, lo cual no es una buena relación riesgo-beneficio, considerando los muchos efectos adversos del bupropion.

Efectos adversos: Insomnio, temblor, alteración de la concentración, cefalea, mareo, depresión, tendencias suicidas, alucinaciones, temor irracional, sequedad de boca, alteración gastrointestinal, dolor abdominal, estreñimiento, fiebre, rash, prurito, sudoración, urticaria, alteraciones del gusto. 


*Clonidina: es un medicamento usado como antihipertensivo, pero también se lo usa en pequeñas dosis para tratar el síndrome de abstinencia, por su actividad inhibitoria a nivel cerebral.

Efectos adversos
: depresión mental, edema de pies y parte superior de piernas, síndrome de Raynaud, mareos, somnolencia, sequedad de boca, constipación, capacidad sexual disminuida, sequedad y prurito ocular, pérdida del apetito, náuseas y vómitos.

*Vareniclina (Champix): es la droga más nueva, aprobada recientemente. Bloquea los receptores de la Nicotina por lo cual no se siente el deseo de fumar ni se padece el efecto de la abstinencia.

Efectos adversos: náusea, estreñimiento, gases, vómito, acidez estomacal, mal sabor de boca, aumento o disminución del apetito, dificultad para dormirse o permanecer dormido, sueños extraños o pesadillas, somnolencia, dolor de cabeza, sarpullido.



¿Qué pasa si vuelvo a fumar?

Para muchos fumadores es muy difícil dejar de fumar, y pueden necesitar de dos a siete intentos antes de poder dejar del todo. Aunque el porcentaje de recaídas es mayor en las primeras semanas o primeros meses después de dejar de fumar, las personas que dejan de fumar por 3 meses, con frecuencia son capaces de mantenerse libres del tabaco por el resto de sus vidas.

Vacuna para dejar de fumar

Se está desarrollando una vacuna contra la nicotina llamada NicVax que parece ser segura, bien tolerada y eficaz para ayudar a las personas a dejar de fumar. Esta vacuna todavía está en etapa de estudio y no está disponible para la población general. En un estudio de 38 semanas participaron 68 fumadores que recibieron una de tres dosis distintas de la vacuna o un placebo. El estudio demostró que el 38 por ciento de las personas que tomaron la dosis alta de la vacuna dejaron de fumar por al menos 30 días.

La vacuna funciona produciendo anticuerpos que se adhieren específicamente a la nicotina y evitan que ésta penetre en el cerebro. Esto reduce los efectos placenteros de fumar y reduce la adicción a la nicotina.


Cómo usar correctamente los chicles de nicotina para optimizar el tratamiento

Los chicles de nicotina son muy útiles cuando se decide dejar de fumar, pero hay que tener en cuenta que no son chicles normales y corrientes. Es un fármaco que contiene entre 2 y 4 miligramos de nicotina, por lo que su sabor no es tan agradable como un chicle común.
Liberan cantidades controladas de nicotina en la boca y pertenecen a un método denominado Terapia de Sustitución de Nicotina.
Al masticar el chicle la mucosa bucal absorbe la nicotina, que pasa a la sangre. Posteriormente llega a los centros nerviosos del cerebro, donde actúa simulando el efecto placentero de un cigarrillo fumado. Al pasar 30 minutos después de comenzar a masticar, la nicotina en la sangre es menos de la mitad de lo que podría aportar un cigarrillo.
Es recomendable recurrir a ellos cuando aparecen las ganas de fumar. No se deben consumir más de 10 chicles al día. Si el fumador siente demasiadas ganas de fumar a lo largo del día y no puede controlarlas con los chicles, puede solicitarle a su médico el uso de un parche de nicotina.
Es imperioso seguir las indicaciones del médico durante el tratamiento.
El error más común de algunos fumadores es rebajar por su cuenta la dosis y la frecuencia del chicle, lo que puede llevar al fracaso del método.

Cómo masticar un chicle de nicotina

El chicle de nicotina no es como un chicle normal, hay que masticarlo de un modo diferente para obtener mejores resultados.

• Masticar lentamente el chicle hasta que aparezca el sabor

• Después de unas 10 masticaciones, hacer una pausa dejando el chicle reposar entre la mejilla y la encía

• Esperar a que el sabor disminuya

• Empezar de nuevo a masticar lentamente el chicle

Todo este proceso debe durar aproximadamente 30 minutos.
Si se mastica demasiado rápidamente, como si fuera un chicle normal, libera una cantidad muy importante de nicotina y un gusto fuerte y picante. De esta forma se produce también una disminución de la eficacia del chicle, hipo o dolor de estómago.
Evite beber café o zumos de frutas (ácidos) antes y durante el uso del chicle, ya que estas bebidas disminuyen la eficacia.

Efectos secundarios de los chicles de nicotina

Los chicles de nicotina no provocan efectos no deseados serios.
Puede llegar a presentarse: vértigo, dolor de cabeza, náuseas, ardor de estómago, hipo, dolor de encías, inflamación de la boca y la garganta. La mayoría de estos efectos pueden evitarse si mastica la goma según las instrucciones arriba indicadas para que la liberación de nicotina sea gradual y no resulte agresiva.

Duración del tratamiento

De 8 semanas a 3 meses como máximo.
Si bien es de venta libre en farmacias es recomendable iniciar el tratamiento con supervisión médica para ir ajustando la dosis de acuerdo a la evolución, a fin de optimizar los resultados y el éxito del tratamiento.
Es importante no interrumpir el tratamiento prematuramente, ya que disminuye mucho las posibilidades de éxito.


¿Cómo dejar de fumar? Guías de autoayuda

¿Sabía que la mayoría de los fumadores quiere dejar de fumar?
Las estadísticas han demostrado que son el 70 % las personas que desean abandonar la adicción a la nicotina.
Pero esto no es tan sencillo. Si bien muchos fumadores han dejado de fumar por sí mismos, la mayoría ha pasado por algún intento, sin conseguir resultados exitosos.
En realidad casi todos los fumadores pasan por varios intentos antes de conseguir abandonar definitivamente el cigarrillo.
Es habitual que estas recaídas aumenten la sensación de fracaso, alimentando el mito que presupone que nunca lo van a lograr.
En primera instancia
cuantas más veces se haya intentado, más cerca se está de lograrlo y por otro lado existen guías que pueden sistematizar el intento obteniendo mayores beneficios.
Si quiere dejar de fumar pero no sabe cómo, estas guías pueden ayudarlo.
Le explicarán qué cosas le impiden decidirse, cómo prepararse cuando lo haya decido, cómo enfrentar las situaciones que se presenten cuando ya haya dejado de fumar, cómo manejar la abstinencia a la nicotina y cómo mantenerse sin fumar a largo plazo.

Hay diferentes estadios en el proceso de abandonar la adicción:


: cuando usted ni siquiera está pensando en dejar de fumar
: cuando quisiera hacerlo pero no está decidido
: cuando se está preparando para hacerlo
: cuando ya ha dejado y no quiere volver a fumar

Las guías para dejar de fumar le pueden ayudar a transitar por todos estos estadios.
Brindan información fundamentada en las evidencias científicas actualizadas que se puedan ofrecer para dejar de fumar.
Lo más importante para lograrlo es que esté decidido y permanezca comprometido con el proceso de recuperación de la adicción al tabaco.


En qué etapa se encuentra usted?


Puede saberlo con la auto-evaluación que aparece a continuación, eligiendo la opción que mejor refleje su situación:
1. No estoy pensando en dejar de fumar : usted está en etapa de pre-contemplación.

2. Estoy pensando dejar de fumar en los próximos 6 meses : usted está en etapa de contemplación.

3. Estoy intentando dejar de fumar en el próximo mes: usted está en etapa de preparación.

4. Dejé de fumar en los últimos 6 meses: usted está en etapa de acción.

5. Dejé de fumar hace más de 6 meses: usted está en etapa de mantenimiento.



Descargue desde este link la guía de autoayuda en pdf: 


http://www.msal.gob.ar/images/stories/ryc/graficos/0000000584cnt-2017-05_manual-autoayuda-dejar-de-fumar.pdf



Fuente:


Programa Nacional de Control del Tabaco – Ministerio de Salud - Argentina





Afecciones de frecuente consulta en la oficina de farmacia

Definición, clínica, diagnóstico, etiología, prevención, tratamiento, rol del farmacéutico y cuándo derivar al médico.